
El pasado 7 de septiembre, recibimos una de esas noticias que siempre son motivo de tristeza para todos los que formamos parte de la Cofradía.
Juan Carlos Luengo, que fuera Hermano y Pujador del Crucificado durante muchos años, nos dejó desafortunadamente tras una larga enfermedad, que supo mantener y llevar de la mejor forma posible, sin perder un ápice su sonrisa para quienes le rodeaban.
Nuestro Hermano, miembro de una familia muy involucrada con y para la Cofradía, siempre estaba dispuesto a llevar su Paso tan querido por él.
Ésta familia bañezana, quiso depositar gran parte de las flores que le acompañaron en su despedida, en la Capilla que durante muchos años le acogió.
Desde la Cofradía queremos enviarles, nuestro agradecimiento por éste gesto, un fuerte abrazo, nuestras sentidas condolencias y pésame, al mismo tiempo que acompañarles en su dolor.
Que Nuestro Padre Jesús Nazareno le acoja en su seno y Nuestra Señora de La Amargura le ampare bajo su manto.
D. E. P.